Llevo unas 3 semanas de pereza bloguera, sin actualizar nada. Aunque la verdad, teniendo un blog con 3 seguidores tampoco que me tengo que estresar, voy a ir poniéndolo al día.
Finales de marzo: unos días primaveralmente veraniegos, soleados y cálidos, que invitaban a pasear.
La gata de los vecinos sigue viniendo a nuestro porche a tomar el sol y pedir caricias
Finales de marzo: unos días primaveralmente veraniegos, soleados y cálidos, que invitaban a pasear.
La gata de los vecinos sigue viniendo a nuestro porche a tomar el sol y pedir caricias
Gafas de sol, gorra, botellita de agua, y de paseo por los alrededores del pueblo. Lo han llenado de flores Aquí hay una competición de pueblos floridos, y hay que mantener la puntuación.
Y además en los jardines todo está también brotando, así que hay colores para acompañar a los calores.
En la zona deportiva que hay junto al río viven unos gatetes. No es mal sitio, y parecen cuidados.
El río baja con alegría, ya están olvidados los hielos, y el agua de las montañas ayuda
Ya hace tiempo intentamos seguir un paseo de los recomendados por Gersicotti, pero nos perdimos un poco. Hoy, con mapa, es todo más fácil. De todas maneras hacemos alguna variación para evitar el paso cerca de un vertedero que hay por ahí. Los campos de trigo están esplendorosamente verdes, y los arbustos que ponen como setos empiezan a florecer. Trop beau.
De vuelta pasamos junto a la fuentecilla milagrera de San Juan
Y terminamos el paseo con los saludos de un perrete con cara de buenísimo.
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